miércoles, 27 de noviembre de 2019

8 años después...

Hay días que siguen siendo grises
ya que tu ausencia aún lo llena todo,
no ha pasado ni un solo momento
en que no te recuerde de algún modo, 
te fuiste siendo yo casi una niña
y aquí estoy hecha una metomentodo.
¿Te acuerdas los primeros meses
del miedo que tenía a olvidar tu cara?
Pues mira que han pasado ocho años
y sigue tan dentro de mí a fuego grabada,
que si cierro los ojos hasta puedo sentirte
acariciando mi mejilla sonrosada,
como cuando me sentaba en tu regazo
aún siendo una adolescente alocada.
Me enfado con mis sueños 
porque ni en ellos te he dejado de buscar
pero que culpa tendrán ellos
de que yo no te haya dejado de necesitar,
quizás si se lo pido a tu mágica luna
me deje una noche un ratito contigo soñar.
Seguiría diciéndote cuanto te añoro
pero me reñirías y con toda la razón...
Por muchos días grises que vengan
no dejarás de vivir en mi corazón,
no sé qué camino seguiré pero siempre
tus ojos azules serán mi religión.



martes, 12 de noviembre de 2019

Rema pequeña.

Niña, levanta los ojos y mira,
mira todo lo que hay a tu alrededor
hay muchos motivos para sonreír
aunque ahora solo sientas dolor.
Grita, grita con todas tus fuerzas
y suelta ese pesado lastre del temor.

Una pérdida duele, duele muy adentro
es un huequito que no se llenará,
pero no estés triste pequeña
que una sonrisa tímida asomará.
Dicen que el tiempo cura las heridas
yo no puedo prometerte que así será,
pero sí que merece la pena cada día
y que ella contigo también luchará.

Mírate en el espejo y dime que ves
ella solo sentiría devoción,
en silencio te acaricias la mejilla
y un vuelco da tu maltrecho corazón.
Mírate niña, las lágrimas son necesarias
aunque salgan con rabia y emoción.

Que tus ojos recuperen su magia
que tu sonrisa reclame su lugar,
porque no se sentiría más orgullosa
de ver a su niña volver a brillar.
Quiérete tanto como ella te decía
y hacia delante siempre debes de remar.