¿Sabes cuáles han sido los mejores regalos que he tenido?
Tu voz susurrando en mi oído, tu sonrisa cuando más la necesitaba, cuando tu mirada se encuentra con la mía, cuando apoyo mi cabeza en tu pecho y siento tu respiración, el que me digas te quiero sin venir a cuento, poder abrazarte cuando todo va mal, un mensaje que saca mi mejor sonrisa, sentir esa sensación que me sube por el cuerpo cuando te veo, me abrazas y deseo que por nada del mundo termine ese momento, porque simplemente me hace sentir importante y especial. Una caricia que me hace sonreír, unos ojos que me miran con la mayor dulzura intentando sacarme una sonrisa. Tantos momentos vividos y compartidos, tantas confidencias de madrugada de regreso a casa, esa comprensión que leo en tus ojos y nunca escuchar ningún reproche de tu boca, el saber que siempre estás ahí pase lo que pase, sentirte cerca aunque nos separen cientos de quilómetros, sentirme protegida y sentirme querida cuando estoy contigo.
Sí, esa persona eres tú, la que siempre está a mi lado,, a cada momento y a cada instante, para compartir lágrimas y risas. La persona que sé que siempre formará parte de mi vida, porque no la imagino sin ti.
Pensar que han pasado seis años, seis años con muchos cambios, con personas diferentes en nuestras vidas, seis años en los que hemos crecido, hemos madurado, hemos reído, hemos llorado, hemos visto amaneceres de vuelta a casa hablando de las vueltas q da la vida, de la gente que hay en nuestras vidas, tantas y tantas anécdotas que quedan en nuestros recuerdos....Y te tendría tanto que agradecer, sobre todo en estos últimos meses, (lo sabes tan bien como yo) que no soy capaz de expresarlo con palabras. Pero lo más importante es que seis años después sigues estando ahí, siendo una de las personas más importantes de mi vida...
Gracias por quererme, por protegerme, por cuidarme, por escucharme, por dejarme ser parte de ti.
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